Un buen líder profesional necesita contar con mucho más que habilidades básicas de liderazgo. Los grandes líderes, independientemente de su personalidad y cualidades base, se crean a través de la experiencia y de la formación complementaria que van adquiriendo en diferentes ocasiones. Y, por supuesto, contar de manera natural con carisma y espíritu de líder son dos cualidades que harán mucho más fácil el proceso para convertirse en un buen líder profesional.
Desde Great Place to Work® ofrecemos formación práctica con la que aprender a ser ese líder al que todo el mundo sigue sin dudar. La prueba de que el liderazgo se está ejerciendo de manera satisfactoria se encuentra en los propios equipos que dependen de ese líder: si se sienten orgullosos de su responsable, manager o directivos y trabajan día a día creyendo en las pautas marcadas, es que se está caminando por el camino correcto hacia un liderazgo de éxito.
Las 15 pautas indispensables para ser un buen líder profesional
El liderazgo se caracteriza por una serie de cualidades que pueden desarrollarse y adquirir con la práctica. No se trata de convertirse en un líder profesional de manera automática sino en ir adquiriendo las cualidades necesarias de manera paulatina y poniéndolas en práctica en diferentes situaciones profesionales con las que conseguir ser un referente para los equipos. La clave está en conseguir un equipo de personas involucradas y motivadas en los proyectos, misión y valores para los que estén trabajando.
Para ello, existen varias formas con las que conseguir ser un buen líder profesional:
- Escucha a tu equipo
Si lo que quieres es generar confianza y espíritu de equipo, es fundamental escuchar las opiniones de las personas que lo forman. Tanto las críticas como las felicitaciones son oportunidades de crecimiento profesional para los líderes. De los empleados podrás adquirir información de calidad y veraz sobre el modo en que se han realizado diversos procesos o cómo se ha llevado a cabo la toma de algunas decisiones.
- Espacios para conversar
Crea espacios y momentos donde todas las personas tengan oportunidad y momento para hablar. Es importante saber cómo se expresa cada miembro del equipo, cuáles son sus opiniones y formas de actuar ante diferentes situaciones. Escucha de manera activa a las personas y conseguiréis trabajar de manera multidisciplinar y de una forma mucho más eficaz.
- Ejemplo a seguir
Un buen líder debe ser esa persona capaz de inspirar, de hacer que el resto de personas quieran aprender de él. Para ello, no hay mejor forma de convertirte en un ejemplo a seguir que con los propios actos. Conviértete en esa persona de la que aprender trabajando y consigue desarrollar así una cualidad más para ser un buen líder profesional.
- Comunicación eficiente
Aporta confianza para generar una comunicación eficiente de manera bidireccional. Así, un buen líder no solo es una persona capaz de comunicar de manera eficiente, también debe ser una persona con capacidad para escuchar, comprender y valorar la perspectiva de los demás miembros del grupo.
- Haz que te apasione tu trabajo
Solo de esta manera, amando lo que haces, podrás plasmarlo correctamente hacia los demás. No podrás ser el líder que deseas si tu trabajo no te inspira, si no crees en lo que haces y de la manera en que lo haces.
- Sé firme con las decisiones
Si de verdad crees que la decisión tomada es la correcta, sé firme con la decisión. La seguridad en cada acción y decisión hará que el equipo que tenga que ejecutarlas lo haga creyendo en la decisión tanto como tú.
- Descubre las fortalezas
Identifica las fortalezas de tu equipo y haz que sean sus mayores puntos a destacar. Contribuye a que tu equipo sepa cuales son sus mayores cualidades, las hagan crecer y se conviertan así en las fortalezas capaces de llevaros al éxito.
- Conoce las debilidades
Al igual que las fortalezas, deberás conocer tus propias debilidades y las del equipo en general. Así, aprenderás a delegar aquellos puntos donde se presentan más debilidades, tanto como líder a nivel personal como parte del equipo.
- Trabaja la incertidumbre
En un negocio, hay situaciones que no se pueden controlar o prever. A pesar de la formación, de la profesionalidad de los empleados y de una buena forma de liderar, la incertidumbre es algo con lo que un buen líder deberá lidiar en su día a día.
- Haz que confíen en ti
Y para ello las decisiones tomadas deben ser consistentes. Tras evaluar la situación y analizar las posibles opciones para hacer frente, haz lo que piensas y sé consecuente con los actos. De lo contrario, si tomas decisiones de las cuales luego te vas a arrepentir, será muy difícil que los equipos depositen su confianza en ti.
- Deja que tu equipo tenga libertad
Un buen líder profesional interfiere solo cuando es sumamente necesario. Así, aportando libertad en su día a día e incluso en la toma de decisiones, estarás depositando confianza en ellos. Esto será fundamental para hacerles crecer como grupo y para conseguir su involucración de manera personal. En caso de algún fallo o error, también deben contar con cierta libertad para resolverlo sin la necesidad de un líder.
- Buen líder y buena persona
Lo personal y lo profesional a veces deben ir de la mano. Ser un buen líder no solo está relacionado con cualidades profesionales, también debe ser una persona con valores, principios. Un buen líder debe ser una persona buena, una persona íntegra.
- Evita la frialdad
Es fundamental conectar con los diferentes miembros que conforman un equipo. Los líderes del presente y del futuro no actúan de manera hierática, no son robots sin emociones que no tienen en cuenta las situaciones personales o las demandas de las personas. Un buen líder profesional no debe evitar las emociones sino todo lo contrario.
- Disfruta el liderazgo
Disfruta del camino hasta convertirte en ese líder que siempre deseaste y, una vez llegues al objetivo, continúa disfrutándolo. No dejes que el estrés o las situaciones del día a día opaquen lo que sabes que es necesario para ejercer como el líder profesional que tu equipo se merece. Disfruta de tu trabajo y disfruta de ejercer el liderazgo de la manera adecuada para hacer crecer el negocio en general y a tu equipo en particular.
- Continúa aprendiendo.
Adquiere nuevos hábitos de liderazgo, continúa aprendiendo formas en las que tomar decisiones o hacer crecer equipos de trabajo. Invierte en tu conocimiento y formación profesional para seguir siendo un buen líder profesional capaz de llevar una compañía al éxito de manera eficiente y con el cuidado a los empleados en el centro de la estrategia.
Aunque ser un buen líder profesional no es una cualidad con la que nazcamos, con formaciones como “Leader for all” de Great Place to Work®, irás adquiriendo habilidades de liderazgo indispensables para convertirte en esa persona para la que todo el mundo quisiera trabajar. Haz que tu liderazgo te haga crecer como profesional y como persona, manejando diferentes situaciones de la manera correcta.