Social Think es una idea de negocio emprendedora y una empresa innovadora que surgió de la necesidad de un estudiante de periodismo español que no consiguió realizar su sueño profesional en su país. Cosas de la crisis.
Acabada la carrera universitaria, Víctor Franco realizó prácticas en varios medios de comunicación españoles y pudo comprobar que la independencia a la hora de informar quedaba en la cuneta y que el trabajo de redacción no llegaba ni siquiera para vivir.
Tras colaborar con Amnistía Internacional, vio que era en esa órbita donde quería girar. Allí donde la comunicación es más directa, más auténtica y más necesaria y decisiva.
Víctor no se lo pensó dos veces y vio más oportunidades en Colombia que en España. Hizo las maletas y con mucho esfuerzo creó su proyecto Social Think. Que hoy es una de las principales agencias de comunicación de Colombia que trabajan con ONGs y fundaciones de ayuda en exclusiva. Para Víctor fue una suerte encontrar, además, a una socia que entiende como un alma gemela emprendedora. Su querida Sylvia Lucía Rugeles.
Pero Social Think no nació de la nada. Brotó de dos de las pasiones de Víctor, la comunicación y su dedicación voluntaria y entregada a la cooperación. Su gran ventaja es que cuando Víctor llegó a Colombia nadie, absolutamente nadie, se ocupaba de dar cobertura a las necesidades específicas de la comunicación de estas entidades sin ánimo de lucro.
Las debilidades que Social Think intenta corregir en la labor de divulgación de las acciones de las ONGs siempre son las mismas. Se realiza un gran trabajo sobre el terreno, pero las estrategias de comunicación de las ONGs no están ni de lejos a la altura, casi nunca son efectivas.
Algo muy de agradecer que destaca Víctor es también la facilidad con la que los directivos de las grandes ONGs departen en clave cordial. Es fácil llegar a ellos. La calidez de trato es una de las claves de la buena sintonía en estos proyectos de comunicación. Víctor ha hecho las Américas con una idea emprendedora y ha triunfado donde otros ni siquiera imaginaban negocio. Todo, para emprender con el corazón.
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